Paleofrikadas
Todo vale VII
Todo vale en el mundo de los dinosaurios de plástico, pero en ese caos puede vislumbrarse en ocasiones alguna adaptación evolutiva cuasi-biológica. Hace unos meses, el comentarista apodado Saurus describía un espécimen de su colección como:
"una suerte de Nodosaurus con una boca gigantesca y cuya mandíbula está curvada, similar a la del Masiakasaurus. (...) Sus puntos de apoyo son las patas posterores y la mandíbula, quedando las patas anteriores líbres quizas para atrapar sus presas o transportar cuchillos que utilizará como armas arrojadizas".
Las fotografías que me envió poco después me dieron tal envidia que no descansé hasta conseguir un ejemplar similar. Durante la búsqueda di, además, con otra especie aún más avanzada en esta peculiar tendencia evolutiva. Boca más grande, mandíbula más afilada, dientes más romos, cráneo aplanado (alojando probablemente un cerebro reducido) y microftalmia. Mi hipótesis preliminar es que estos animales se mueven en aguas someras y fangosas; su labio inferior, cual arado romano, va abriendo surcos en el fondo para detectar moluscos u otros tipos de alimento. Tarea que no requiere una vista ni tampoco una inteligencia demasiado agudas.
2008-05-17 | Haz un comentario (hay 49)
Etiquetas: todo vale, tendencia evolutiva, nodosaurus, dinosaurios de plástico
Tuitear