Teoria de la evolucion
En la teoría sintética moderna de la evolución, el mecanismo de la selección natural explica la
apariencia de diseño inteligente en el mundo biológico. Es el único agente evolutivo capaz de generar adaptaciones tales como estructuras complejas funcionales, órganos o instintos. Como dice Richard Dawkins, antes de que se descubriera la selección natural no podía haber ateos. Bueno, sí podía haberlos, de hecho los había, pero estaban preocupados y se rascaban mucho la cabeza. ¡Vayamos al grano! La definición.
Selección natural es la reproducción diferencial de los genotipos en una población. Las poblaciones son conjuntos de individuos de la misma especie; los genotipos son combinaciones de genes, y reproducción diferencial significa, simplemente, que no todo el mundo contribuye con el mismo número de hijos a la siguiente generación.
Dicho de otro modo, se produce selección natural cuando hay diferencias en número de hijos que cada individuo saca adelante, y cuando esas diferencias están causadas, al menos en parte, por la posesión de unos genes u otros.
¿Dónde quedó aquello de la supervivencia de los más aptos o la preservación de las razas favorecidas? Son frases que pasaron a mejor vida. En su día sirvieron para divulgar la teoría de Darwin, pero hoy resultan bastante inexactas y engañosas.
Cuando Darwin explicaba su idea de selección natural, se centraba fundamentalmente en la supervivencia. Actualmente, el concepto se ha trasladado a la reproducción: lo importante es quién tiene hijos y cuántos. Sobrevivir es un requisito imprescindible para traer al mundo churumbeles, pero no te los asegura. El concepto moderno de selección natural está mejor definido que el concepto clásico, y al mismo tiempo es más amplio (la selección sexual darwiniana, por ejemplo, se ha convertido en un caso particular de selección natural).
¿Cuál es el efecto de la selección natural en una población? Modificar las frecuencias de los genes, es decir, producir evolución (
la evolución se define como el cambio en las frecuencias de los genes en una población). Y esa modificación no es al azar, sino que (simplificando un poco) tiene una dirección: la de aumentar la adaptación de esa población al medio en el que vive.
Existen muchos malentendidos sobre la selección natural, que provocan incomprensión, rechazo visceral, espumarajos en la boca, sensación de que el concepto es una solemne estupidez y los biólogos deben de estar medio tarados... Algunos de estos errores han sido profusamente combatidos en la divulgación científica, como por ejemplo la creencia de que la selección natural siempre acaba produciendo un progreso general en los organismos. A otros no se les ha dado tanta importancia, y yo creo que lo merecen. Si no me parte un rayo, o si no me aburro, los iré comentando en estas páginas.
© El Paleo-freak
2003-01-02 | Haz un comentario (hay 125)
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De: glenys |
Fecha: 2003-01-02 04:54 |
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Hola,
Me gusta mucho tu blog.
Quería enviarte esta información que llegó hoy en un cable de la agencia de noticias EFE.
Ellos dicen que han encontrado una anomalía en la teoría de la evolución pero la verdad es que no entiendo muy bien de qué se trata. No creo que lo que muestra el artículo demuestre en realidad un fallo en la teoría. ¿No se había hablado de esto ya antes?
Aquí está:
Científicos encuentran una anomalía en teoría de la evolución
Washington, 1 ene (EFE).- Cuando las especies compiten, los individuos que se adaptan con más rapidez ganan; pero si la relación es cooperativa, los que evolucionan con más lentitud pueden tener ventajas, según un estudio que publica la revista Proceedings, de la Academia Nacional de las Ciencias.
Hace 143 años, el naturalista británico Charles Darwin puso en marcha una revolución científica con la publicación de su obra "Sobre el origen de las especies por medio de la Selección Natural", que documentó el papel de la adaptación de los individuos como clave para la supervivencia en circunstancias cambiantes.
Ahora, el profesor de zoología Carl Bergstrom, de la Universidad de Washington; y Michael Lachmann, investigador del Instituto para Matemáticas en las Ciencias del Instituto Max Planck, de Alemania, han encontrado indicios de que la cooperación entre especies diferentes a veces da ventajas a los individuos lentos para cambiar.
Bergstrom y Lachmann dieron a su hipótesis el nombre de "efecto del Rey Rojo", porque en parte se apoya en un modelo matemático construido sobre la teoría de la evolución en el cual pusieron a un Rey Rojo y una Reina Roja -especies que cooperan- en lados opuestos de un tablero de ajedrez.
Pero también se apoya en la observación de especies concretas, como las hormigas y las Lycaenidae, la mayor familia de mariposas que cuenta con muchas especies diferentes.
La relación entre esas especies de hormigas y mariposas es beneficiosa mutuamente: las hormigas protegen a las orugas de las Lycaenidae contra los predadores, y los gusanos gastan buena parte de su energía produciendo azúcar y excreciones ricas en proteína que alimentan a sus protectores.
En el juego matemático, el Rey Rojo es paciente y se mueve lento, y la Reina Roja es impaciente y se mueve rápido, y ambos negocian dónde se encontrarán.
Ambos quieren viajar lo más lejos posible, pero el rey explica que está en desventaja, porque es lento y puede moverse sólo un cuadro por vez. La reina puede moverse tantos cuadros como desee, pero cede y encuentra a su esposo en el lado de éste en el tablero.
La conclusión de este "juego matemático" es que en el curso de una negociación entre partes que cooperan, en la cual una de ellas tiene escaso margen de maniobra, la otra está forzada a ceder más si las dos han de continuar su relación.
El dilema entre los animales estudiados es cuánta comida deben proveer las orugas y cuánta deben exigir las hormigas, y la respuesta cambia con el tiempo dependiendo de la rapidez con que evolucionan las especies.
A veces, escribieron Bergstrom y Lachmann, las orugas ofrecen menos comida, y a veces las hormigas pueden buscar nuevas fuentes de alimentación.
"Lo que la tasa de evolución nos dice es cuánto tiempo puede seguir una población tomando lo que se le ofrece", indicó Bergstrom.
"Cada vez que algunas hormigas evolucionan y salen a buscar algo mejor, eso estimula a las orugas para que ofrezcan más. Pero si las hormigas no se van en busca de un trato mejor, eventualmente se adaptan a aceptar menos".
"Las especies que evolucionan rápido ceden a la presión más que las que evolucionan lentamente", agregó.
Esto, añadió el investigador, es una anomalía en lo que hasta ahora conforma el cuerpo general de la teoría de la evolución y que en general se ha enfocado en qué ocurre cuando las especies compiten.
"Yo no creo que la selección natural se incline a favor de las especies que evolucionan lentamente", dijo Bergstrom. "Si esto sucediera, iría casi contra todo lo que hasta ahora hemos creído. Pero será interesante ver qué ocurre". EFE
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